Logran importar cemento

Fuente: El Norte

Nueve años después de un primer intento fallido para importar cemento a México, el grupo de regios que encabezó ese proyecto concretó su objetivo de enfrentar a las grandes cementeras del País.

Ahora importaron cemento de Cuba, y no de Rusia; utilizaron el buque «Atenea», en el primer intento fue el «Mary Nour»; cambiaron su razón social a Comercio para el Desarrollo Mexicano del Sureste y esta vez el mercado a disputar es Yucatán, aunque los empresarios revelan su interés de entrar a Veracruz y otras entidades del País.

Ricardo Alessio, uno de los tres socios de Comercio para el Desarrollo Mexicano del Sureste, informó que en octubre importaron por Puerto Progreso, Yucatán, 2 mil 850 toneladas de cemento, que son vendidas bajo la marca Siboney en sacos de 42.5 kilogramos.

De entonces a la fecha, destacó Alessio, en los municipios donde venden su producto, las otras marcas de cemento bajaron los precios en promedio 7 por ciento, medido en términos de kilogramos.

En entrevista telefónica, Alessio detalló que el material proviene de una planta cubana que opera bajo un esquema de participación mixta entre el Gobierno de ese país y la suiza Holcim.

En julio pasado trajeron 15 toneladas que fueron enviadas a la Universidad Autónoma de Yucatán para someterlas a diversas pruebas de calidad y desempeño para el mercado mexicano, resultando todas positivas, lo que los motivó a aumentar las compras.

El empresario detalló que las 2 mil 850 toneladas traídas suman el 6 por ciento de las 48 mil toneladas que tienen listas para importar, y que además representan un 78 por ciento más de las 27 mil toneladas que pretendieron importar en el 2004.

«Por fin se está dando una competencia de este producto en Yucatán, que es donde distribuimos el cemento; en un mes en esa zona los precios han bajado y las grandes cementeras dirán que fue por la desaceleración económica, pero qué casualidad que en un mes haya bajado en esa proporción; fue por la competencia que estamos dando», aseguró Alessio.

«Ahorita llegamos a Yucatán, pero estamos analizando distribuir también en Quintana Roo y Campeche, y de encontrar nuevas fuentes de suministro (proveedores) podríamos llegar a distribuir en Veracruz y otros estados».

El volumen traído hasta ahora representa el 63.5 por ciento de las compras totales foráneas de cemento gris registradas entre enero y junio de este año.

Incluyendo el cemento cubano, las importaciones totales del material sumaron hasta octubre pasado, 7 mil 212 toneladas, el nivel más alto registrado hasta ahora, frente a una producción nacional de 36.2 millones de toneladas anuales y un consumo, también al año, de 34.6 millones.

Alessio explicó que para evitar problemas en el padrón de importadores es que los tres socios formaron la nueva empresa Comercio para el Desarrollo Mexicano del Sureste y a través de ella solicitaron la compra a la cementera en Cuba.

En el 2004, Alessio, Luis Bonales y Ricardo Camacho (ex empleados de Cemex), a través de la empresa Comercio para el Desarrollo Mexicano, intentaron importar 27 mil toneladas de cemento ruso a través del buque «Mary Nour», pero no lo lograron y acusaron de ello a Cemex.

El caso aún sigue dirimiéndose en juzgados mexicanos.

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