Reforma fiscal 2007

La actual reforma fiscal no generará crecimiento ni empleos y sólo seguirá privilegiando a los políticos y corporativismo sindical. Inhibe la inversión, recae sobre los mismos contribuyentes, y no incidirá sobre la evasión, ni los actuales privilegios. Complica el cumplimiento, recae en el contribuyente cautivo y por si fuera poco, acentúa incentivos perversos.

Ingresos Suficientes del Gobierno:

  • Los ingresos del gobierno federal sí son suficientes. En el 2006, su ingreso total fue el 24.1% del PIB y no el 11%, pues además del ISR e IVA, cobra innumerables impuestos a través de sus monopolios.
  • Comparativamente, los ingresos federales son mayores a los de Canadá (20%) y de Estados Unidos (18.5%). Son más del doble que China e India, y en seis años han aumentado el 34.9% real, mientras que el PIB en 17.1% y el ingreso promedio del ciudadano en 7.8%.

El gasto público es excesivo e improductivo:

  • El problema radica en un excesivo gasto corriente. Como ha ocurrido, a medida que aumentan los ingresos del gobierno, en lugar de fomentar inversión productiva y empleo, sólo se ha incrementado su gasto por concepto de nóminas, prebendas sindicales y por la equivocada política de combatir la pobreza con subsidios (que han aumentado 264% en 6 años).
  • El escaso crecimiento económico del país, en los últimos 25 años (2.6% anual), se debe a políticas que han privilegiado el dispendio en el gasto público a burócratas y a sus monopolios; tolerado oligopolios privados sin la intervención del estado; y lanzado a competir -sin fusil- al sector productivo contra firmas de otros países en donde los mismos no existen.
  • Privilegiar al sector burocrático no aumentará la inversión del 15% actual al 25% del PIB que se requiere para crecer al 6% anual; pero sí aumentará las prebendas a partidos políticos, funcionarios, legisladores, y sindicalizados del gobierno, mientras el 50% de la población sigue en la pobreza.

Evasión, elusión y privilegios: más impuestos mayores cargas a los cautivos.

  • La incapacidad de los responsables para evitar la evasión y la elusión no lesiona al gobierno, sino al causante cautivo. El gobierno conoce muy bien los núcleos de evasión, elusión y privilegios, sin embargo, por su temor a atacarlos, prefiere diseñar el IETU; que a su vez, adolece de graves problemas técnicos al incidir en causantes cumplidos; causar doble tributación, gravar actividades que se requiere fomentar y causar mayor complejidad y costo de cumplimiento.
  • Mientras que continúen los notorios dispendios en el gasto, la complejidad fiscal, la falta de equidad y las exenciones a sectores políticamente poderosos, la informalidad y la evasión no se eliminará.

Propuesta de los Empresario Independientes:

La reforma fiscal debe sustentarse en un compromiso del gobierno de limitar su gasto al 24% del PIB, eliminar sus compras a los oligopolios privados que vendan a precios superiores a los internacionales, a reducir los gastos publicitarios de todos los gobiernos y poderes, y a eliminar las facultades de funcionarios y legisladores para decidir sobre sus propios ingresos y prestaciones, las prestaciones y pensiones excesivas de los burócratas y las facultades de los funcionarios para otorgar prestaciones adicionales a sindicatos públicos.

En términos generales, el gobierno debe:

  • Comprometerse a reducir en 1.5% del PIB la evasión y elusión, en aquellos sectores que evaden masivamente.
  • En lugar de implementar el IETU, modificar la Ley del Impuesto sobre la Renta para eliminar privilegios y capturar los principales núcleos de evasión. en arrendamientos, actividades profesionales, utilidades en venta de empresas y en bolsa de valores y gravando utilidades excesivas de los oligopolios.
  • Agregar los productos indebidamente catalogados como alimentos y medicinas a la ley del IVA y en su lugar, desgravar a la clase media de impuestos lesivos como el ISAN, la tenencia de automóviles y las tarifas de autopistas e impuestos en aeropuertos.
  • Eliminar los sobreprecios de la energía que lastran al sector productivo y hacen inviable su crecimiento acelerado.
  • Establecer un organismo similar al “Small Business Administration” de los Estados Unidos para subsanar las fallas de mercado que impiden la creación y desarrollo de las PYMES.
  • Reducir 50% los trámites que afectan a las empresas medianas y pequeñas.
  • Cancelar los miles de juicios de Hacienda contra pequeños y medianos causantes; al liberarles los embargos y retirarlos de las listas negras que les impiden financiarse y venderle al gobierno.

El Gobierno existe para beneficio de la sociedad, no para sí mismo. La falta de recursos es producto de la pobreza creada por el escaso crecimiento económico, la ineficacia recaudatoria, privilegios otorgados a poderosos y un gasto público desmedido. La sociedad no tolerará más impuestos dada la ineficiencia, corrupción, gasto politizado y privilegios del sector público.

La pobreza no se reducirá con dádivas, sino con un crecimiento acelerado; logrado sólo cuando seamos capaces de alentar al productor y un gobierno pequeño, barato y eficiente.

Un crecimiento en la recaudación será de beneficio para todos, en medida que esto sea resultado de una mayor actividad y crecimiento económico, y no así producto de un mayor acaparamiento sobre lo existente.

El ciudadano actúa por incentivos, si no es rentable invertir, nadie lo hará. Sin el esfuerzo de los pequeños y medianos empresarios, el gobierno no tendrá la fuerza para hacer crecer al país. Si se cobra mucho a pocos para que lo gasten políticos y funcionarios, la sociedad responderá con la misma moneda: con evasión y desánimo. El Sexenio del Empleo será otro de estancamiento.

Replanteando la reforma fiscal existiría oportunidad a eliminar los principales obstáculos al crecimiento: energía cara y oligopolios privados. En su lugar, modificar el ISR, para eliminar privilegios y extensiones, le permitirá recaudar más eficientemente y sin distorsiones.

La ANEI, voz de pequeños y medianos empresarios queremos un país exitoso, próspero y justo. Pedimos que eliminen los estorbos que nos impiden progresar: los privilegios al Estado, a los políticos y a unos pocos oligopolios, los que juntos han llevado al México a los últimos lugares en crecimiento y productividad.

Exigimos una justa recaudación y un gasto inteligente; no un terrorismo fiscal a los pequeños y medianos empresarios.
Este es el camino correcto para cumplir la promesa de generar empleos.

Asociación Nacional de Empresarios Independientes A.C.
Monterrey, N.L. Septiembre 6, 2007